NUESTRA METODOLOGÍA PARA LA OBRA MISIONERA

El carácter de Dios y Su metodología son las que moldean nuestra identidad y funcionamiento como misión. Creemos en un solo Dios todopoderoso, Creador del Universo y Autor de la historia redentora, en la cual actúa para salvar a aquellos que ponen su fe en Él. La historia de la redención es un relato divino de cómo Dios interactúa con la humanidad. Esta historia es crucial para evangelizar a las comunidades étnicas , para formar y discipular iglesias en todo el mundo. Representa la comunicación directa y clara de Dios a la humanidad. Por eso, la comunicación clara es fundamental, lo que implica aprender y usar el idioma de aquellos a quienes queremos alcanzar, así como comprender profundamente su cultura.

Aunque requiere tiempo aprender el idioma y adaptarse culturalmente, creemos que es la mejor manera de transmitir la Palabra de Dios de manera clara. Cristo vivió y mostró la verdad de Dios a través de Su vida y acciones. En otras palabras, Él no solo habló sobre la verdad, sino que también la demostró con Su comportamiento y manera de vivir. Esto incluye cómo se comunicaba con las personas, cómo se adaptó al lenguaje y a la cultura judía,  cómo mostraba amor y gracia, y cómo actuaba de acuerdo con los principios de Dios. Consideramos como elementos fundamentales en la plantación de iglesias :

  • La alfabetización.
  • La traducción continua de la Biblia.
  • La formulación y desarrollo continuos de un plan de estudios basado en la Historia de Dios.

El programa de alfabetización permite no sólo enseñar a la gente a leer y escribir, sino que es un ambiente único para modelar los principios de plantación de iglesias, adicional,  contribuye en la construcción de relaciones con aquellos a quienes compartiremos el Mensaje. Buscamos traducir la Biblia a todos los idiomas del mundo, especialmente en las etnias donde estamos desarrollando misiones. La traducción de la Biblia comienza con las partes necesarias del plan de estudios evangelísticos.

Después de la formación de una iglesia, el proceso de traducción continúa como parte del discipulado de la Iglesia en sus etapas, eventualmente se establece un equipo para traducir libros completos de la Biblia. Estos esfuerzos continúan hasta que toda la Biblia está traducida, posiblemente (en muchos casos) siendo la propia iglesia establecida quien termina la traducción en su idioma. La traducción de la Biblia es sólo el comienzo. Para construir una iglesia saludable, es crucial seguir con el proceso de discipulado basado en la Historia de Dios. Esta increíble historia no solo establece los principios de la vida cristiana, sino que también guía el ministerio tanto dentro como fuera de la iglesia local.

 

NUESTRo enfoque

MISIONES TRANSCULTURALES

¡Llevando luz a dónde no ha llegado!

Nos enfocamos en cruzar fronteras culturales y lingüísticas para llevar el Evangelio a aquellos que aún no conocen la luz de Cristo y la comunidad de fe.

¿Por qué es importante? 

Porque creemos que es fundamental priorizar este enfoque transcultural. Es vital que enviados de otras culturas vayan a donde están estas personas, superando las barreras lingüísticas y culturales que dificultan su acceso al Evangelio.

El desafío: 

Nuestros misioneros se adaptan a la cultura y aprenden el idioma local. Esto es esencial para establecer conexiones significativas y compartir el Mensaje de esperanza con precisión y efectividad.

¡Juntos Somos Más Fuertes!

Las misiones son un verdadero trabajo en equipo entre Dios, las iglesias locales, los enviados y los misioneros. 

¿Por qué es tan importante? 

Porque la colaboración es esencial para cumplir con el mandato de hacer discípulos en todo el mundo. Esto implica trabajar con otros hermanos en Cristo, otras iglesias y agencias misioneras.

Nuestro enfoque: 

Formamos equipos para servir entre comunidades indígenas y etnias del mundo. Enseñamos principios de trabajo en equipo a nuestros candidatos, asegurando que cada obra sea efectiva y significativa.

Equipos de misioneros y consultores trabajan juntos para progresar en cada obra, llevando esperanza y amor a las comunidades en las que nos encontramos.

 ¡Creciendo juntos!

Como misioneros, nos vemos como aprendices que buscan crecer según la voluntad de Dios. 

¿Cómo lo hacemos? 

Acompañamos a nuestros estudiantes y misioneros mediante el discipulado y la amistad mutua. Estamos aquí para ayudarles a superar desafíos y alcanzar metas en cada etapa de la obra.

Nuestro compromiso: 

  • Discipulado: Guiamos a nuestros estudiantes (y misioneros)  en su camino espiritual, brindándoles apoyo y enseñanzas basadas en la Biblia.

     

  • Amistad Mutua: Fomentamos relaciones de amistad y apoyo, creando un ambiente donde todos puedan crecer, animarse mutuamente, intercambiar experiencias.

¡Todos somos necesarios en la obra de Dios!

Reconocemos la importancia de contar con roles de apoyo para que nuestros misioneros puedan trabajar en el campo con eficacia. 

¿Qué retos tenemos?

Desde contabilidad hasta entrenamiento, cada rol es esencial para llevar a cabo la obra de alcanzar a las etnias y establecer iglesias. Cada miembro del equipo juega un papel crucial en nuestra misión.

Nuestro enfoque: 

  • Contabilidad: Aseguramos que los recursos se gestionan de manera eficiente y transparente.
  • Entrenamiento: Preparamos a nuestros misioneros con las habilidades, aptitudes y conocimientos necesarios para su labor.

¡Unidos en una misión!

Involucrar a las iglesias locales que apoyan a nuestros misioneros es vital para nosotros. 

¿Por qué es tan importante? 

Porque buscamos integrar en nuestra labor sus aportes, sean recursos, tiempo, consejos o recomendaciones para mejorar y el apoyo moral o respaldo espiritual.  Reconocemos que juntos, como la Iglesia de Cristo en la tierra, hacemos la obra.